Las ilusiones de la infancia suelen resurgir en la memoria de manera inesperada, invadiendo los sentidos, saturándolos de recuerdos, transportando la mente a tiempos llenos de imaginación y de entusiasmo.
Al volver a este pasado de ensueño, es casi imposible no recuperar momentáneamente todo lo que se encontraba alrededor: olores, imágenes, sensaciones, personas, etc., dando la oportunidad de poder viajar en el tiempo, revivir, casi de manera real, aquello que pasaba por la cabeza.
Con estas experiencias, de recordar los sueños que se tenían de pequeños, se va recuperando la alegría inocente de los primeros años, la dulce ingenuidad de la omnipotencia. Es gracias a los sueños de la infancia que se llegan a establecer nuevas metas, incluso pueden alcanzar aquellas que parecían imposibles.
Para algunos, la frase: recordar es volver a vivir significa, entre otras cosas, que es la oportunidad de recuperar la fuerza de voluntad, la ilusión y el empuje para alcanzar aquello por lo que vale la pena luchar, aquello que emociona y remonta a la etapa en que se era todopoderoso.
1 Comentarios o Sugerencias:
hola!
los sueños cuando dormimos me resultan entretenidos, y recordar cuando (creiamos en verdad que) todo podíamos hacer, que ereamos creadores y destructores de todo lo que nos rodeaba, es aún mejor.
pd: y mi hermano creyendo cosas del discovery chanel para viajar en el tiempo. :)
Salud0s
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